Unidad de Codo y Mano

Entre las causas más frecuentes de dolor y alteraciones de las actividades del día a día de los pacientes podemos hablar de aquellas que están relacionadas con eventos traumáticos como tenemos tanto las fracturas del complejo del codo o de la muñeca y la mano.

Por otro lado, debido a la funcionalidad de nuestro brazo en muchas ocasiones hacemos movimientos repetitivos tanto con nuestro codo y nuestras manos a niveles de intensidad variables en función de nuestra actividad profesional o deportiva. Estas actividades y en correlación en muchas ocasiones con la falta de actividad física o sedentarismo se convierten en un factor de riesgo de patologías vinculadas al tendón o tendinopatías.

También podemos encontrarnos cuadros de dolor con afectación del tejido nervioso que en ocasiones tienen origen en esta región por atrapamiento de estos nervios y otras veces de problemas vinculados al cuello, lo que hace que sea muy importante hacer una buena exploración del paciente.

Tenemos otras patologías donde las causas del dolor del paciente no están claros y suele deberse a numerosos factores que cuando se manifiestan juntos, alteran a nuestra sistema nervioso desencadenando cuadros de dolor entre otros signos y síntomas.

Desde la unidad de codo y mano de INDOL ponemos disposición del paciente los más innovadores instrumentos de evaluación y tratamiento apostando siempre por el trato individualizado y la medicina basada en evidencia. Para esto la electromiografía de superficie y la ecografía nos son de gran ayuda para objetivar los resultados de la evaluación.

En el abordaje del codo y de la mano la evaluación es determinante para poder determinar los posibles factores de riesgo que están implicados en el desarrollo y perpetuación de los síntomas del paciente. Esta forma de trabajar nos lleva a diseñar programas individualizados para abordar todos los posibles factores implicados en el cuadro clínico.

Para el tratamiento de estas disfunciones y el control y alivio del dolor nos valemos de diferentes herramientas como son el control de la medicación e intervenciones anestésicas sobre el plexo braquial que engloba los nervios que van al brazo. También la neuromodulación ecoguiada en el tratamiento del dolor neuropático en patologías que cursan con atrapamiento nervioso o con debilidad muscular debido a un daño en el nervio. Por otro lado, en el tratamiento de las tendinopatías, ademas de lo anteriormente mencionado, las infiltraciones pueden ser de gran utilidad en el alivio sintomático y mejora del movimiento sin dolor.

Estos tratamientos solemos combinarlo con fisioterapia, (técnicas dirigidas a la articulación, musculo o sistema nervioso), y ejercicio, (ejercicio aeróbico, movilidad, fuerza y control de movimiento), que han demostrado ser capaz de modular el dolor y maximizar los efectos cuando se trabaja de manera combinada.

Por otra parte, para la mejora de la movilidad en aquellos pacientes que de manera inespecífica la han perdido o para aquellos que la han visto reducida tras un evento traumático, una inmovilización, tras fractura o cirugía, el tratamiento con fisioterapia para el incremento de la movilidad articular nos va a ayudar a recuperar movilidad y restablecer la función.

En el tratamiento del dolor crónico como cuadros de dolor complejo, la terapia cognitiva desde la psicología, la educación en neurociencia del dolor y la nutrición, en combinación con lo anteriormente mencionado, nos proporcionan un abanico terapéutico muy amplio para poder personalizar y diseñar un plan de tratamiento acorde a la patología del paciente.